Alimentos antiaging

A la hora de cuidarse es importante tener en cuenta la alimentación, no sólo para mantener la línea sino para prevenir diferentes enfermedades, y ningún tratamiento de belleza es tan efectivo como el que viene desde el interior. Ya se sabe: somos lo que comemos.

Las principales sustancias antiaging son los vitaminas, los minerales y los polifenoles. Pero, ¿en qué alimentos las encontramos? Aquí tienes la lista de los que no pueden faltar en tu cocina:

Zanahoria, calabaza o brocoli: puedes tomar cremas de verdura, zumos, revueltos o  añadirlos como guarnición de carnes y pescados.

Legumbres: fuente de fibra y aminoácidos. Pueden parecer pesadas ahora que se acerca el verano, pero podemos consmuir garbanzos haciendo hummus o hamburguesas, o una ensalada de lentejas con pimientos, maíz dulce, aceitunas y atún con una salsa de mostaza y limón, por ejemplo. 

El aceite de oliva: los ácidos grasos monoinsaturados juegan un papel esencial para mantener una buena calidad de vida.
Frutos rojos: en el yogur, en postres, con cereales o en batidos.

Alimentos como los tomates o la zanahoria contienen betacarotenos, aportan vitamina A, y además de sus propiedades antioxidantes, son esenciales para una correcta pigmentación, y ayudan a conseguir un bronceado homogéneo y más rápido.

El ajo, a pesar de ser detestado por muchos, contiene propiedades beneficiosas para el organismo: es antiséptico, depurativo y funguicida. Un pequeño truco para evitar que sea tan indigesto es eliminar el 'corazón' abriéndolo por la mitad antes de trocearlo.

El chocolate, consumido con moderación, no sólo es bueno para el cuerpo, sino para nuestro estado de ánimo. Contiene feniletilamina, sustancia que nos provoca una gran sensación de bienestar.

No nos olvidemos de la bebida antioxidante por excelencia: el té. Además de las manidas variedades -verde, rojo, negro- podemos probar otras nuevas, como el blanco. Sus propiedades diuréticas y adelgazantes lo convierten en la bebida ideal para sustiuir el café o los refrescos. Ahora que llega el calor, con hielo y limón no hay excusa.
 

Tampoco hay que olvidarse de consumir al menos 2 litros de agua al día, y hacer 5 comidas, teniendo en cuenta que a partir de las 18:00 el metabolismo se ralentiza y por tanto debemos reducir la ingesta calórica, por lo que el desayuno y la comida deben ser más copiosos y la cena más ligera.